No me han detenido a causa de la joven
histérica, sino […] porque me consideran sospechoso de haber realizado actos de
pedofilia con niñas, a causa de la fabricación de dibujos eróticos, es decir,
obscenos, que habría enseñado a algunos niños o dejado a la vista por
inadvertencia. […]¡Una infamia! ¡Y una enorme idiotez! Es una vergüenza para la
cultura, una vergüenza para Austria que una cosa semejante pueda sucederle a un
artista de su país.
Nunca lo he
ocultado: he hecho dibujos y acuarelas que son eróticos. Pero son siempre obras de arte – puedo
afirmarlo, y las personas que entienden algo de ello lo confirmarán de buen
grado –. ¿Acaso no hay otros artistas que han producido imágenes eróticas?
[…]
Pero no por ello encerraron al artista.
Ninguna obra de arte erótico es
indecente cuando vale por sus cualidades artísticas; únicamente se transforma
en indecencia cuando el espectador es indecente.
Edizione di Arthur Roessler, Egon Schiele
en prisión – notas e dibujos
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